jueves, 21 de abril de 2016

Universidad Pública de Navarra Pamplona, España

Liliana Montserrat Espinosa ZamudioLicenciatura en Comercio InternacionalUniversidad Pública de NavarraPamplona, EspañaSeptiembre 2015 – Febrero 2016


Mi experiencia

Pasadas ya unas cuantas semanas, recordando esas horas interminables de avión, esos nervios que no me dejaban dormir, de salir de mi zona de confort, un mundo nuevo que solo en mi imaginación existía, por fin había llegado el momento que con tanto esfuerzo y dedicación había logrado. Es difícil escribir tantas emociones, tantas experiencias en una sola palabra.
Llegar a la ciudad como turista, sin conocer a nadie, tener que buscar donde vas a vivir, tantas veces me perdí y en esos momentos esa impotencia de no saber cómo llegar, ahora son solo buenos recuerdos. Esa ciudad donde todo es tan tranquilo, tan seguro y que tengan horarios muy distintos, el domingo todo está cerrado. El poder salir de noche y regresarte a la hora que quisieras sola sin que nada te pase, no tiene precio. Adaptarme al clima fue la parte más difícil para mí, porque Pamplona está en el norte de España y hace mucho aire, llueve, a veces todo el día es gris y hace frio.
El primer día de clases, perdida en los salones sin ningún amigo, sin entender las clases, muchas veces me preguntaba qué hago aquí;  porque aunque el idioma es español tienen muchas palabras distintas y hablan muy rápido. Es tan diferente ver que tú tienes que presentarte con el maestro y decir que vienes de intercambio, porque si no lo haces ellos ni en cuenta. Las clases son diferentes desde como enseñan los maestros, la puntualidad, si tienes duda tienes que ir a asesorías aparte, hasta la forma de evaluar.
Vivir con personas completamente desconocidas de diferentes nacionalidades, no tienes opción y tienes que confiar, pero al final acabaron siendo mi familia durante el intercambio.
Tuve la oportunidad de viajar y conocer muchos países, esa  vulnerabilidad de estar otra vez en un país que no conoces, obligarnos a volver a la base de todo, como si fuéramos niños, sin entender ni un cartel, ni un menú, ni una sola frase de lo que nos rodea. A dejarnos a nosotros mismos elegir cómo lo queremos hacer esta vez, ahora que ya sabemos que existe una forma, pero que hay otras más  por conocer. Tantos momentos mágicos, horizontes nuevos  es tan difícil describir y son cosas que jamás se olvidan.
Es por eso que vivir en otro país te cambia para siempre. Nunca serás el mismo y nunca verás las cosas de la misma manera. Así que ahora, los invito a que se atrevan, a que rompan paradigmas y vivan le experiencia que conlleva realizar un intercambio. Dejemos a un lado el miedo que nos deja inmóviles haciéndonos creer que ya no hay vuelta atrás, porque sí que la hay y es en todas las direcciones. Salgamos de esa zona de confort, de esa seguridad absurda que nos abraza desde que somos adultos, es de lo que hay que huir como si fuera fuego.

“Traveling is not just seeing the new; it is also leaving behind. Not just opening doors; also closing them behind you, never to return. But the place you have left forever is always there for you to see whenever you shut your eyes.” Jan Myrdal

lunes, 26 de octubre de 2015

Mi experiencia en Corea del sur. Por: Kathia Vanessa García González

MI EXPERIENCIA EN COREA DEL SUR
Viajamos para cambiar, no de lugar, sino de ideas.

            Corea del Sur es un país situado al norte de Asia que limita al norte con la República Democrática Popular de Corea, al este con el mar de Japón, al sur el estrecho de Corea y al oeste con el mar amarillo. Cerró el 2014 con una población de 50 424 000 habitantes; considerando su superficie el país tiene una densidad de población muy alta, de 503 habitantes por kilómetro cuadrado.[1] Su capital es Seúl, su idioma es el coreano y, según las estadísticas del 2005, la mayoría de su población practica el budismo, seguido del protestantismo y después el catolicismo.[2]

En realidad sabía muy poco acerca del país cuando decidí solicitar mi intercambio a Corea del Sur, afortunadamente no me arrepiento en lo absoluto; considero que ha sido una de las mejores decisiones que he tomado.

Debo decir que la espera fue larga, mi carta de aceptación llegó a principios de diciembre del 2014 y yo pensé que ya no llegaría.

La visa, certificados médicos, pasaporte y demás documentos consumieron por completo mis últimos dos meses antes de partir, y el día llegó. La noche del 25 de Febrero del 2015 salí de mi casa con una maleta de 25 kilogramos, la cual era incapaz de cargar por mí misma; una mochila escolar que sería mi compañera de viaje por varios países y de la cual tendría que despedirme al culminar mi semestre; y, lo más importante, un montón de sueños por cumplir.

Viajé durante toda la noche con rumbo al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México para tomar mi vuelo a las 6:00 am del 26 de Febrero con destino a San Francisco, California ya que México no cuenta con vuelos directos a Corea del Sur ni viceversa. Posteriormente abordé mi segundo y último vuelo, el cual duró once horas; no estaba segura de que mis piernas reaccionaran después de tanto tiempo. Por la diferencia de horario (15 horas) llegué a las 5 pm a Corea el Viernes 27 de Febrero y personal de Dankook University ya esperaba por nosotros en el aeropuerto. Nos transportaron a lo que sería nuestro hogar durante cinco meses (dormitorios dentro del campus) y caí rendida inmediatamente.

Al lunes siguiente comenzaron las clases, la escuela organizó una plática informativa donde nos dieron a conocer puntos importantes sobre nuestra estancia en DKU. Debo decir que siempre nos trataron muy amablemente y procuraron nuestro bienestar.

Cursé tres materias en inglés, las cuales tenían un enfoque casuístico, lo cual me permitió adquirir los conocimientos de una manera más profunda. Los profesores eran de otras partes del mundo que, aparte de ser personas muy bien preparadas, compartían sus puntos de vista sobre los temas expuestos en clase y eso me permitió conocer cómo es que piensan personas con contextos completamente distintos al mío y a tolerar cuando discrepaban de mi pensar. Sin dejar de mencionar a mis compañeros de clase, los cuales me auxiliaron ante cualquier duda que tuviese y fueron muy hospitalarios conmigo. Además, cursé clases del idioma coreano; en lo particular era la clase que más disfrutaba pues estaba con mis demás compañeros de intercambio y las maestras que impartían la clase eran muy pacientes con nosotros.

La vida en el campus brindaba un ambiente muy ameno, las clases eran de 9 de la mañana a 5 de la tarde, lo cual permitía  tener la tarde libre para realizar otro tipo de actividades como deportes, asistir a algún taller cultural o simplemente salir a convivir con amigos.

Alrededor de la escuela había muchos restaurantes, cafés y bares en los que era normal encontrar a alumnos y maestros de Dankook; era seguro a cualquier hora, los niveles de delincuencia en Corea son muy bajos y las personas son muy respetuosas.

El tiempo pasó muy rápido, conocí personas que se volvieron mi familia durante mi estancia; amigos que espero conservar por mucho tiempo y, a muchos de ellos, volver a verlos en un futuro. Definitivamente hay un antes y un después de Corea, y es que no creo que sea el simple hecho de haber vivido en el extranjero, sino todo lo que ofrece ese bello país; una cultura de respeto, trabajo y esfuerzo. Fue un conjunto de lugares, personas y experiencias las que hoy me hacen añorar regresar y sé que lo haré, pues siempre se regresa al lugar donde se amó la vida. Me es imposible recordar en el transcurso de mi día algún momento vivido y, en seguida, soltar una sonrisa al aire. Al final, creo que fue Corea quien me eligió a mí y doy gracias por ello.


Kathia Vanessa García González




[1] (2015). Crece la población en Corea del Sur en 204.000 personas. 24 de Octubre del 2015, de Expansión Sitio web: http://www.datosmacro.com/demografia/poblacion/corea-del-sur
[2] (2015). Culto y Religión. 24 de Octubre 2015, de KOREA.net Sitio web: http://spanish.korea.net/AboutKorea/Korean-Life/Religion













jueves, 30 de julio de 2015

Doble Titulación LCI en Sup de Co.---Alejandra Saucedo---

De agosto del 2008 a octubre del 2009, tuve la oportunidad de vivir lo que se convirtió hasta este momento de mi vida en una de las experiencias más enriquecedoras  tanto a nivel personal como profesional, caracterizado por un inmenso  aprendizaje cotidiano de mi misma,  de mi cultura y de todo lo diferente y nuevo a lo que me enfrenté: lugar, gente,  costumbres, hábitos, comportamientos, comida, clima, escuela, etc., es decir, otra cultura.
El vivir y estudiar en Francia, me permitió tener un panorama más amplio de su cultura y forma de vida, por lo que  me encantaría poder compartir algunas de mis apreciaciones durante mi estancia.
La Rochelle, Francia es una ciudad pequeña ubicada sobre la costa atlántica, a sólo 3.5 horas de París. Esta ciudad pudiera ser comparada con Guanajuato, en el sentido de que es una ciudad turística, pequeña y con una gran cantidad de estudiantes. Algo característico de La Rochelle  es su cuidado al medio amiente, el uso de bicicletas y coches eléctricos es muy común, y el separar la basura es cosa obligatoria, además se trata de una ciudad muy segura.
Yo estudié en la Escuela Superior de Comercio de La Rochelle, en el programa de Bachelor Internacional, y es aquí donde viene ¡mi primer “shock”! (y quisiera aclarar que al llamarlo shock no hago  referencia a un sentido negativo), ¡fisonomías distintas!, ¡voces extrañas!  ¡idiomas diferentes a cada lado al que dirigía mi atención!: español, inglés, francés, chino,  alemán y otros más que no podía ni siquiera identificar. Sí, ¡tomaría clases con personas de diferentes nacionalidades!, eso me emocionaba bastante, nunca había tenido la oportunidad de estudiar y convivir tan de cerca con una comunidad tan diversa.  Pero no todo sería tan fácil como conocer gente, por que ahora habría que convivir y  trabajar juntos, trabajar en equipos donde estaba con 2 chinos, 1 alemán, 3 franceses, 2 españoles,  2 inglesas, suena muy bien pero al poner las cartas sobre la mesa resulta que todos y cada uno de los integrantes somos tan diferentes en manera de pensar,  y el primer reto era ponerse de acuerdo, mucho estrés, mucho tiempo a invertir, ¡mucho que aprender!
En cuanto al sistema educativo en el que me vi inmersa en mi escuela francesa, me percaté de muchas diferencias respecto al sistema que había llevado en Guanajuato. Por ejemplo, el nivel de exigencia es mucho mayor,  y el ambiente es muy competitivo. Pero para mi sorpresa  es muy raro que los estudiantes obtengan excelentes notas, precisamente por el grado de dificultad.
La metodología de trabajo es más práctica que teórica y está muy orientada hacia la investigación, al desarrollo de ensayos, artículos, proyectos, solución de problemas, etc., de hecho muchos de los exámenes son sobre desarrollo de temáticas, opiniones fundamentadas y aplicación práctica de lo visto en clase, no se trata tanto de memorizar conceptos. Otro aspecto que quisiera mencionar es sobre la cuestión del plagio, que es de suma importancia, ¡cero “copy paste” o “wikipedia”!, realmente no estaba acostumbrada a investigar, ni conocía la metodología para hacer citas, referencias o construir la bibliografía, y eso lo aprendí  con un rotundo cero en un trabajo, ya que es considerada una falta muy grave y sancionada.
Las clases  son impartidas en inglés y en francés, lo cual revolvió un poco mis neuronas en un principio haciendo un divertido  “frenchanglaispagnol” pero que con el paso de algunas semanas cada uno fue tomando su lugar y me permitió mejorar considerablemente mi aprendizaje  en idiomas.  Algo que aprecié mucho, fue el hecho de que tuve catedráticos casi todos con doctorado o profesionales dentro de su campo de enseñanza ¡y  lo mejor! de diferentes partes del mundo. Por ejemplo, con un perfil impresionante, mi maestra favorita: Dra. Taran Patel,  de India, especialista en “Management Intercultural”,  ha trabajado en diferentes países como Francia, España, Finlandia, Reino Unido, Estados Unidos, entre otros, y ha escrito numerosos artículos, publicado libros, y solo como dato curioso su asesor de tesis del doctorado fue un premio nobel.
En cuanto a los horarios de cursos me fue un tanto  difícil adaptarme a su método, éste consiste en cursos intensivos, es decir cada curso tiene una determinada duración de horas y estas horas pueden ser cubiertas en una sola semana según la disponibilidad de los catedráticos, por ejemplo, una misma materia 4 horas por la mañana y 4 horas por la tarde por tres días consecutivos a la semana, era demasiado para mi capacidad de atención y concentración en un mismo curso, puesto que estaba acostumbrada a clases de máximo de 3 horas y con receso a la mitad. No hay un plan establecido para los cursos, éste se consulta cada semana. Cada alumno tiene una cuenta en el intranet de la escuela en donde podemos consultar nuestros horarios, ver calificaciones, descargar archivos de las clases, consultar ofertas de prácticas, contactar  profesores, etc.
En la escuela hay diferentes actividades, talleres y deportes, así como una asociación de alumnos para los estudiantes internacionales que organizan diferentes actividades de integración como fiestas o viajes. En general los franceses tienen una actitud muy abierta hacia los estudiantes extranjeros,  lo cual creo que se debe a que su formación consiste en dos años de expatriación en diferentes partes del mundo. Sin embargo, el establecer una amistad no es tan fácil y lleva algo de tiempo, puesto que en general son muy celosos de su vida personal. El famoso “NO”, en México normalmente no estamos acostumbrados a dar como respuesta un NO de manera directa, con frecuencia lo disfrazamos para no parecer descorteces, pero estando en Francia me dí cuenta que para los franceses es de lo más normal decirte NO cuando en verdad algo no les apetece, sin ser una descortesía.
Pero claro que no todo se trata de ir a la escuela, el ser estudiante en La Rochelle implica también la diversión. En la  Rochelle, hay varios bares  o pequeños antros, pero sobretodo se acostumbran las fiestas en casas, donde son muy comunes las fiestas internacionales.
Sin duda  todas y cada una de las vivencias acumuladas a lo largo de mi estancia se convierten en un gran aprendizaje, que me ha hecho madurar, tener una visión distinta  y más abierta  donde el obtener el segundo título profesional se convierte en un logro secundario comparado con mi crecimiento personal.

Ale Saucedo Franco.

miércoles, 29 de julio de 2015

Ian en Suecia (DCEA-LRI)

Suena trillado pero, hay cosas que no puedes aprender en tu entorno normal, tienes que salir y aventurarte. Es tan simple, cuando no conoces nada, todo lo que te espera es aprendizaje. Mi nombre es Ian y estuve de intercambio en la ciudad de Västerås, Suecia. Suecia es un país moderno y seguro. Hay tantas cosas que podemos aprender de los suecos, es un país que ha aprendido a respetar las costumbres e ideologías de los distintos tipos de personas que viven en el país. Tienen una política abierta ante los inmigrantes, pero me gustaría aclarar que los suecos, desde mi punto de vista, son un tanto celosos de su privacidad, no entablan una amistad con tanta facilidad, así como estamos acostumbrados aquí en México. Como estudiante de intercambio note una distinción muy notable entre los los que éramos estudiantes extranjeros y los suecos. Puesto que un intercambio es una excelente forma de aprender otra cultura, podría concluir, que los suecos no buscan mostrarte su cultura, más bien todo depende de ti, todo depende de la iniciativa propia. Me gustaría aclarar este punto para que no haya malos entendidos, en comparación con nuestro país, los ciudadanos de Suecia, se muestran un poco herméticos a la hora de compartir su cultura. Suecia es un país innovador y creativo, en verdad que al recorrer las calles, los parques, al realizar tareas cotidianas en la vida, comienzas a encontrar detalles en todos lados que te hacen pensar, ¿Por qué no se me ocurrió antes? Para aquellos que buscan inspiración, una estancia en Suecia les puede favorecer bastante . Las palabras siempre se quedarán cortas en comparación de lo que se puede vivir en un intercambio estudiante, cada quien vive de distintas formas su intercambio, algunos lo aprovechan más que otros, sin embargo todos tienen en común, que una experiencia fuera de tu zona de confort, es y será algo que te marca de por vida. Los suecos como al menos dominan 3 idiomas, el hecho de que todos los suecos hablen inglés, permite que tu estancia sea mucho más sencilla y la comunicación no sea un impedimento. Elegí Suecia puesto que es de los países con un sistema moderno de estudios. ¿Cómo son los estudios en Suecia? Estudiar en Suecia es completamente distinto al sistema mexicano. En este país lo más importante es el auto aprendizaje y el trabajo en equipo. El gobierno de Suecia se hace responsable por los gastos de los universitarios, por lo cual asistir a la universidad es gratuito para todos los suecos y también para extranjeros, actualmente se está viendo un fenómeno en que hay mucha inmigración escolar, muchísimos estudiantes de España, India, China, Pakistán y Países africanos. Por lo cual entrará en vigor un cambio en algunas universidades, en el que se empezará a cobrar los estudios de Maestría a todos aquellos que no cuenten con ciudadanía sueca. Las instalaciones de las universidades son de excelente calidad, y los estudiantes mantienen el buen uso de las mismas, aquí no existe esa mentalidad de rayar mesas, destrozar aquello que se edificó con esfuerzo, puesto que se ve como el patrimonio de todos los suecos y de las siguientes generaciones. Existe demasiada libertad tanto para los estudiantes como para todos aquellos que trabajen en la universidad, lo que importa aquí son los resultados, no tu imagen, por lo cual puedes ver bibliotecarios en pantuflas, chicas en las oficinas con tatuajes, con piercings en la nariz o cejas, la idea de servicio con imagen empresarial, esa que está muy de moda, en el que todos deben tener uniforme o una imagen presentable no existe aquí, se te da la libertad de trabajar como quieras, siempre y cuando cumplas con tus deberes. Es el mismo fenómeno con los estudiantes, tienes todos los recursos a la mano, las sesiones con los profesores son solo de orientación, de enfoques, de presentar dudas, de discutir algunos puntos de vista. Los suecos suelen ser personas informales, puedes hablarles a tus profesores por su primer nombre y es lo más normal del mundo, no son seres omnipotentes ni poseedores del conocimiento único, sino que son gente que se ha preparado con anticipación, que sigue investigando y que aporta sus conocimientos a los alumnos. Todos los profesores son PhD, por lo cual cuentan también con la ayuda de un estudiante de maestría y un estudiante de PhD, para las labores académicas. Una diferencia importante es que uno escoge los cursos que son de su interés y no tiene que llevar una carga materias ya elaborada. Los semestres están divididos por dos periodos, por lo cual son 4 periodos en el año. En cada periodo tienes como máximo el llevar 15 créditos, existen materias que van desde los 3 hasta los 15 créditos. Por lo que es común que un estudiante lleve un solo curso en todo el periodo, lo cual le da la oportunidad de trabajar mientras realiza sus estudios. Cabe resaltar que en Suecia es muy común que al trabajar puedas elegir la cantidad de horas y los días que quieres trabajar, siempre bajo los límites que se te dan, por lo que un lunes puedes trabajar 4 horas y un jueves 7, y tienes que cumplir una cantidad de horas a la semana. Este sistema da la facilidad de combinar el trabajo y los estudios, algo que en México es casi imposible, puesto que te exigen estar en el trabajo las 8 horas de trabajo seguidas. En general se puede decir que los suecos han alcanzado una modernidad como comunidad y han sabido imprimirle ese sello social - liberal que tanto los representa.

lunes, 26 de mayo de 2014

Alumno de la Universidad de Guanajuato en la WVU: estudiar en otro idioma y en otra cultura.

Roberto Guevara estudió la Licenciatura en Relaciones Industriales.
En Agosto Diciembre 2009 realizó un intercambio en West Virginia University, USA por medio del Programa de Movilidad Estudiantil-UGTO.

Estados unidos es un país atractivo por su potencial económico y la exposición de su cultura ante el mundo. Estar ligado al país vecino del norte de una manera tan cercana me hizo querer conocerlo un poco más… quizá mucho más.
Desde el primer instante, cuando pisé el primer aeropuerto, noté las muchas diferencias entre USA y México. Me encontré con un reto enorme pero me sabía listo.
Llegar a Morgantown (después de varias horas de vuelos y esperas en aeropuertos) fue en sí, ya una experiencia sin precedentes; era el destino y mi casa por los siguientes meses. En las primeras horas del primer día viví el desfile de llegadas de compañeros de todas partes del orbe y de nuestros compañeros locales, quiénes llegaban para realizar su registro y acceso al siguiente semestre (que para nosotros no sólo eran rutinas y un semestre más, era todo).
El inicio fue de conocer: conocer el lugar, la gente, la comida, los servicios universitarios, el idioma… en fin, todo el nuevo mundo que antes no habíamos visto ni vivido.
Como Mexicanos (específicamente el grupo de 7 abejas que fuimos a WVU en el año 2009) tuvimos la gran fortuna de no pasar inadvertidos, tanto para las autoridades educativas como para los alumnos, ya que cada día teníamos algo que hacer y algo por compartir; esto nos ganó el reconocimiento de la gente que aún hoy, se acuerdan de nosotros 7 como “los mexicanos” que dejaron huella.
Cada día de los meses que estuvimos ahí, fueron días de experiencias y de aprendizaje. No hubo momentos grises o faltos de intensidad, nunca hubo rutina ni aburrimiento. No hubo malos recuerdos.
Vivimos las diferentes estaciones, desde el calor húmedo intenso, hasta el frío y nevadas. Participamos en eventos culturales, acudimos al estadio, fuimos a fiestas, festejamos y aprendimos. Nos inmiscuimos en sus tradiciones y ellos en las nuestras; viajamos y conocimos. Pero lo mejor, estuvimos a la altura del reto, ya que las clases son en inglés, pero nada que nos detuviera. Como anécdota, en varias clases debíamos exponer (obviamente en inglés) y estábamos muy nerviosos y con cierto miedo, sin embargo, hicimos lo propio y aun con las deficiencias del idioma, obtuvimos el segundo lugar de equipos (éramos 3 mexicanos compitiendo con otros 9 equipos de Estadounidenses).
West Virginia University brinda apoyo a los alumnos en todos los sentidos: religioso, económico, viajes (DC y NYC), conciertos, eventos deportivos, clases de apoyo, acceso al gym, alimentos gratuitos, eventos culturales diversos y excursiones.
El nivel educativo de West Virginia University es muy bueno, las instalaciones son de primer nivel, aunque la Universidad de Guanajuato no se queda atrás; las clases que hemos tomado tienen la particularidad de que están disponibles en línea y son presenciales al mismo tiempo. He encontrado similitudes con nuestra universidad, ambas mantienen un alto nivel educativo ya que en momentos sentimos que estamos en la UG y promueven la diversidad cultural respetando creencias. Los maestros y alumnos se han acercado a nosotros, son ellos quiénes muchas veces se presentan ya que les llama la atención nuestro acento y nuestra forma particular de ser.
Las diferencias entre los estudiantes norteamericanos y los estudiantes de la Universidad de Guanajuato, no son tan amplias, incluso la ciudad es muy similar a Guanajuato. Al igual que las abejas, los “mountaineers” (como se identifican los estudiantes de WVU) tienen sus ventajas y desventajas: en momentos se les nota apáticos en clase y en otros son muy activos y propositivos. Debemos tomar esta experiencia y lo mejor, es que estamos a la altura de enfrentar el reto sin problema alguno.
Al final y después de todo el viaje y la experiencia, me queda decir que valió la pena cada instante que vivimos en West Virginia, hicimos amigos y aprendimos mucho; nada quedó igual después de WVU. 

En este momento, mi experiencia laboral ha sido muy satisfactoria porque tengo una diferencia respecto a otros candidatos que han buscado empleos al igual que yo: estudios en el extranjero, un segundo idioma y una forma de pensar que las empresas y organismos quieren entre sus filas. 

viernes, 16 de mayo de 2014

Gladys Arlette Corona León. Estancia Académica en la Universidad de Málaga (Grado en Relaciones Laborales y Recursos Humanos) Periodo Febrero – Julio 2013

EXPERIENCIA DE ESTANCIA ACADÉMICA EN LA UNIVERSIDAD DE MÁLAGA


El futuro pertenece a aquellos que creen en la belleza de sus sueños.
Eleanor Roosevelt.

La alegría y el aprendizaje de realizar una estancia académica ya sea en una Universidad nacional o internacional, inician desde el momento en que te visualizas y piensas cómo sería esa experiencia y en cuanto te lo propones como una meta en tu vida, en ese momento ya estas emprendiendo el viaje.



PREVIO A LA ESTANCIA ACADÉMICA

Se necesita mucha paciencia y dedicación, para organizar y reunir los requisitos necesarios para llevar a cabo la estancia académica. Se debe de tener en cuenta que es un proyecto que tienes que ir revisando constantemente para lograr un excelente resultado y poder estudiar en la Universidad de tu elección.

Todo el proceso previo a realizar la estancia académica, involucró, citas en la Embajada de España, entrevistas con profesores de perfil internacional, buenas calificaciones, tener más de 450 puntos en el examen TOEFL, obtener la carta de aceptación de la Universidad de Málaga, tener un seguro de viaje, y reuniones con los padres y el equipo de Cooperación Académica.

Estos requisitos son muy importantes y te das cuenta que todo el trabajo que realices, son solamente filtros, pues los estudiantes que tienen la oportunidad de realizar una estancia académica son estudiantes sobresalientes, son embajadores de la Universidad de Guanajuato, ya que lograron representar  su  esfuerzo y entrega, por lo tanto son estudiantes modelo que se dan a conocer al mundo.

Una de mis metas al realizar ésta estancia académica fue lograr obtener el mayor monto posible de becas, para así no hacer que mis papás gastaran dinero de su bolsillo.
Afortunadamente en todas las becas en las que participé, obtuve aprobación, por lo que me sentí muy contenta al poder ayudar a pagar los gastos que realizaría.
Primero obtuve la Beca Santander Iberoamérica, la cual me apoyó con $50,000, los cuales utilicé para pagar la residencia universitaria, en la cual viviría, en ella se incluía el hospedaje y comida.
Posteriormente obtuve la Beca de Transporte que otorga la Universidad de Guanajuato, con un monto de $18,000, la cual me ayudó a pagar los vuelos de avión de ida, de México a España y de regreso, de España a México.
Después obtuve una Beca de EDUCAFIN, la cantidad que me ofreció fue de $50,000, la cual me sirvió de apoyo al realizar gastos personales.
En seguida obtuve tres becas patrocinadas, las cuales en conjunto sumaban la cantidad de $25,000, y las utilicé para pagar el seguro médico y los gastos que realicé para comprar material escolar y libros.

Los momentos que fueron pieza clave en ésta etapa, fue cuando recibí mi carta de aceptación por parte de la Universidad de Málaga, pues me sentí muy contenta y sentía que ya era parte de los alumnos de Relaciones Laborares y Recursos Humanos, de la Facultad de Estudios Sociales y del Trabajo.
Otro momento que marcó mi vida y nunca olvidaré, fue cuando mis papas me acompañaron al aeropuerto de la ciudad de México, para abordar el avión que me llevaría a Málaga, haciendo una escala en Madrid. Sentí mucha alegría al poder compartir mis últimos momentos previos a mi estancia académica, con mis padres, pues recuerdo que me dieron muchos consejos y me felicitaron porque se sentían muy orgullosos de todo mi trabajo y esfuerzo que hice para realizar mi sueño y estudiar en el extranjero. Al momento de despedirme de mis papás, sentí un vacío en mi corazón, sentí mucha tristeza, porque era la primera vez que viviría sola y eso me daba un poco de miedo, además los iba a extrañar mucho, porque con ellos siempre me he llevado muy bien, siempre hemos tenido mucha comunicación, confianza y respeto.





DURANTE LA ESTANCIA ACADÉMICA

Cuando llegue a Málaga sentía un poco de tristeza por mi familia y amigos que dejaba en México, pero sabía que seguiría en contacto con ellos. Pero sobre todo sentía mucha alegría, orgullo y satisfacción de poder llegar a otro continente y conocer otras personas, costumbres y maneras de ver la vida.

Málaga se encuentra al sur de España, forma parte de Comunidad Autónoma de Andalucía, ésta Comunidad, a su vez,  está integrada por las Provincias de Almería, Cádiz, Córdoba, Granada, Huelva, Jaén y Sevilla.
La población de Málaga es de 567,433 habitantes.
Los malagueños, son personas  muy acogedoras, respetuosas y solidarias. Son gente que tienen metas y sueños en la vida. Se preocupan por mejorar académica y personalmente, ya que constantemente se encuentran realizando estudios e investigaciones de posgrado, se casan a una edad madura y tienen pocos hijos, tienen amor  y respeto por la vida, por la naturaleza, por su medio, por los animales y por el propio hombre.

En cuanto a la ciudad de Málaga, es una pieza histórica de España, aquí nació el pintor Pablo Picasso. Su casa natal se encuentra  en el centro de la ciudad, cerca de la Plaza de la Merced. Actualmente en el recinto se encuentra un museo con obras del autor y también se encuentra, la  “Fundación Picasso”, la cual se dedica a brindar becas para fomentar el arte.

Cerca de la casa de Pablo Picasso, se encuentran unas colinas, donde a lo alto se observa un castillo árabe, llamado la Alcazaba o Castillo de Gibralfaro. Para llegar al castillo tienes que caminar una larga vereda, en su recorrido, podrás disfrutar de una vista panorámica sin igual de Málaga, donde puedes observar el puerto de la ciudad, las gaviotas que vuelan sobre el mar, la plaza de toros así como hoteles, iglesias y edificios emblemáticos de la ciudad.
Al llegar al castillo encontrarás un museo donde hay armas, uniformes de soldados, mapas, muebles y juguetes que datan de la España del Siglo XVI

Por otra parte, en el centro de Málaga,  existe un teatro romano construido en la época de Augusto, en el Siglo I A.C,  y cuenta con un centro de interpretación, donde se pueden apreciar vestigios de la zona.

También, hay un Parque Tecnológico de Andalucía, así como un Corredor Industrial, donde se desarrollan muchas de las actividades económicas de Málaga, cabe destacar que esta es la ciudad que tiene mayor actividad económica de las 8 provincias que componen la Comunidad Autónoma de Andalucía.

Para los amantes del futbol se encuentra el Estadio la Rosaleda, donde juega el equipo Málaga Club Futbol.

Así también, existe un museo automovilístico donde se muestran ejemplares mundiales que han sido emblema de su época.

En Málaga hay muchas playas, La Malagueta es la playa más famosa de la ciudad,  donde tranquilamente se puede tomar recostado el sol en la arena, hacer uso gratuito en los aparatos de ejercicio que se encuentra en la costa o degustar algún platillo típico en los “Chiringuitos” que son pequeños restaurantes, construidos en forma de palapa.





VIDA ESTUDIANTIL EN LA UNIVERSIDAD DE MÁLAGA

El nivel educativo de la Universidad de Málaga es muy bueno, los alumnos que actualmente estudian, al igual que nosotros los alumnos de la Universidad de Guanajuato, tuvieron que pasar por un examen de admisión y no es nada fácil ser admitido, ya que existe mucha demanda al ser la mejor Universidad Pública de la región, pues a pesar de tener 40 años funcionando, cuenta con diversas Facultades, donde la oferta académica es muy amplia contando con diversas Licenciaturas, Maestrías y Doctorados.

La Universidad de Málaga se encuentra dentro del Programa Andalucía Tech, siendo una Universidad de Excelencia Académica Internacional, ya que sus programas educativos van de acuerdo a las necesidades y competencias que se viven en la actualidad.
También cuenta con Tecnologías de Información y los profesores son personas especializadas en los temas de las materias que imparten.

Los estudiantes de la Universidad de Málaga contamos con un campus virtual, en el cual estamos en contacto con los profesores, allí tenemos que subir nuestras exposiciones, trabajos y tareas, si necesitamos ayuda o tenemos alguna duda, mediante el campus virtual se lo hacemos saber al profesor y él nos reservará una cita en su oficina dentro de su horario de tutoría.

La Facultad de Estudios Sociales y del Trabajo, en la cual estudié, cuenta con una red inalámbrica para el uso de internet, cada salón tiene una puerta de entrada y una salida de emergencia, así también cuentan con extintores, hay aire acondicionado, el escritorio del profesor cuenta con una computadora y el tiene libre acceso a usarla para proyectar los temas mediante un cañon que el mismo maneja sin ayuda personal de audiovisual.

Podemos hacer uso de las salas de cómputo, de la cafetería y de la biblioteca así como de las salas de estudio. También se cuenta con un centro de copiado en el cual debes de comprar una tarjeta recargable, la pasas por un lector de barras que tiene la copiadora y tú mismo sacas las copias que necesites. En cuanto a la venta de útiles escolares e impresiones, la Facultad cuenta con una papelería.

A la entrada de la Facultad está el área de conserjería, ellos te orientan para cualquier duda, por ejemplo si buscas un salón o la oficina de un profesor.
A su vez, cerca de la entrada, hay una mesa con folletos sobre los cursos, talleres  y eventos que organiza la Universidad y  diariamente se ofrece de manera gratuita un periódico de España así como un periódico que publica la Universidad de Málaga.

Algo que me llama la atención y me gustó mucho es que los salones de toda la Facultad, cuentan con accesos para personas discapacitadas.
Mi recuerdo más significativo en el rubro académico, fue cuando tuve la oportunidad de exponer ante mis maestros, personal académico y compañeros de la Universidad de Málaga, sobre la oferta académica de la Universidad de Guanajuato, ya que como parte de nuestro Servicio Social, la Universidad de Guanajuato nos da material como playeras, plumas, carteles y trípticos para así, llevar una sesión informativa y poder fomentar a que estudiantes extranjeros formen parte de nuestra Comunidad Universitaria.
En el momento en el que estaba exponiendo sentí mucha alegría y orgullo, al poder representar a mi Universidad de Guanajuato y dar a conocer todos los beneficios académicos, culturales, deportivos y sociales que ofrece.

Por otra parte, me gustaría comentar que durante mi estancia académica de 6 meses, viví en la Residencia Universitaria Teatinos, la cual queda muy cerca de la Facultad de Estudios Sociales y del Trabajo, que es donde realicé el sexto semestre del Grado en Relaciones Laborales y Recursos Humanos, esta Licenciatura es equivalente a Relaciones Industriales de la Universidad de Guanajuato.

La residencia es un lugar muy seguro, siempre hay vigilancia. Tenía  mi propia habitación, con baño, closet, escritorio, librero y una vista a un parque, donde todas las tardes familias llevaban a pasear a sus hijos y a sus mascotas.

Por lo que vivir en esta residencia universitaria, me permitió, disfrutar de mi espacio y a la vez también compartir áreas comunes con otros estudiantes, por ejemplo en el comedor, las salas de estudio, el cuarto de televisión, el salón de recreación y el jardín

Otro de los beneficios es que al vivir en la residencia todos los días de la semana puedes gozar de una pensión alimenticia que incluye desayuno, comida, almuerzo y cena.

Me gustó mucho vivir en esa residencia, porque tuve la oportunidad de formar significativos lazos de amistad con estudiantes tanto de España como de Marruecos, Inglaterra, Italia, Alemania, Turquía Argentina, Brasil, Costa Rica y Cuba, ya que ellos también estaban realizando estudios tanto a nivel Licenciatura, Maestría y Doctorado, por lo que el aprendizaje que obtuve de mis amigos de la residencia fue muy gratificante.




DESPUÉS DE LA ESTANCIA ACADÉMICA

Al concluir mi semestre académico en la Universidad de Málaga, decidí viajar y conocer otras ciudades y otro país, por lo que en España visité las ciudades de Marbella, Torremolinos, Frigiliana, Sevilla, Granada, Ronda y Madrid.

En Sevilla tuve la oportunidad de conocer la Plaza de España, la Catedral de Sevilla, el Museo de los Tesoros de la Catedral de Sevilla, donde pude apreciar pinturas de  Fernando Botero, también visité  la Torre de la Giralda, la Universidad de Sevilla, el Palacio de los Reales Alcázares, el Archivo General de Indias, donde tuve la oportunidad de observar el documento de Sentimientos de la Nación de José María Morelos y Pavón, crucé por el  Río Guadalquivir, la Torre de Oro, el Metopol Parasol, la Alameda de Hércules, el Pabellón de Alfonso XII, el Parque de María Luisa y los baños árabes.

Después viaje a Francia, estuve en París y pude visitar la Catedral de Notre – Dame, la Basílca del Sagrado Corazón, Montmartre, la Ópera Garnier, La Universidad de la Sorbona, el Palacio de Versalles y sus jardines reales, el Museo de Louvre, donde puede apreciar pinturas y esculturas como la Venus de Milo y la Mona Lisa, caminar por la Avenida de los Campos Elíseos, el Arco del Triunfo, la Torre Eiffel, subir 56 pisos en 40 segundos en la Torre Montparnasse y viajar en un crucero por el río Sena.

Posteriormente, preparé mis maletas para regresar a México y continuar estudiando Relaciones Industriales en la Universidad de Guanajuato.

Despedirme de mis maestros, amigos y los lugares que conocí fue muy triste y difícil, pero a la vez me daba alegría el tener la oportunidad de haber vivido tantas experiencias y  haber obtenido muchos aprendizajes para mi vida estudiantil, laboral y personal.

Gracias a la realización de mi estancia académica, me di cuenta que tengo las habilidades y conocimientos necesarios para llevar a cabo mis sueños, por lo que al cumplir con este sueño, otros sueños comenzaron a surgir.
Ya que al término de mi carrera, me gustaría poder participar y obtener becas, para regresar a España y estudiar una Maestría y un Doctorado en Recursos Humanos.

Admiro mucho el trabajo del equipo que conforma la Dirección de Cooperación Académica de la Universidad de Guanajuato, pues sin ellos no existirían los convenios que nos permiten conocer y estudiar en otras Universidades y no tendríamos el apoyo y la guía que ellos nos hacen favor de brindar para llevar junto con nosotros esta experiencia académica, cultural, social y sobre todo personal.

Las vivencias que he tenido gracias a esta estancia académica me han ayudado a desarrollarme en la vida y a crecer como ser humano.

Tuve la oportunidad de conocer gente maravillosa, valoro mucho a mis profesores, a mis compañeros y a mis amigos, de ellos he aprendido tanto y a la vez les he compartido información importante sobre México y sobre la Universidad de Guanajuato.

Por lo que puedo concluir que realizar esta estancia académica en la Universidad de Málaga, ha sido una de las mejores decisiones de mi vida, fue una oportunidad única, me sentí muy feliz al poder tener la dicha de representar a nuestra Universidad de Guanajuato, con la cual me siento identificada y valoro mucho todo el trabajo que lleva a cabo para fortalecer a sus alumnos y hacernos unos mejores ciudadanos y personas.